Landed in Ibiza les presenta este proyecto vanguardista y contemporáneo que consiste en la creación de un complejo residencial único compuesto por 24 exclusivas viviendas de alta gama. Estratégicamente ubicado entre dos calles principales y frente a una tercera vía que será parte integral del proyecto, este terreno presenta una topografía inclinada con un desnivel de siete metros. Para integrar armoniosamente el edificio con el entorno, se ha diseñado dividir el volumen propuesto en siete cubos, cada uno de los cuales se adapta a un metro de desnivel, logrando así una perfecta adaptación al terreno.

Tras este meticuloso ejercicio de integración, se han concebido dos tipologías de viviendas: una de 120 metros cuadrados con dos dormitorios y otra, tipo dúplex, de 180 metros cuadrados con tres dormitorios. Ambas tipologías comparten una premisa fundamental. Cada vivienda se desarrolla alrededor de un eje central que incluye un jardín, fomentando así un estilo de vida conectado con la naturaleza. La iluminación natural se ha integrado estratégicamente con este espacio verde, posicionando los volúmenes mencionados anteriormente de manera que la luz pueda penetrar en cada uno de ellos.

Los accesos a las viviendas se encuentran en el interior del complejo, donde se ha implementado un diseño paisajístico con vegetación que crea un entorno acogedor. Dentro de esta área, se erigen tres estructuras de madera que albergan los núcleos de comunicación. Desde estos núcleos, se extienden pasarelas que conducen a las entradas de las viviendas, integrando así de manera armoniosa los espacios comunes y privados del complejo residencial.